Con 14 años de edad y apenas dos meses de entrenamientos en la pista Los Chasquis de la Vicentina, Rosmery Vizcaíno quiere ser la reina de la velocidad en Pichincha, sus pruebas son los 300m planos de acuerdo a su categoría (prejuvenil).
El accionar y rendimiento técnico que ha alcanzado en las primeras pruebas de entrenamientos, Rosmery ha sorprendido con sus tiempos a su padre, el ex velocista cubano Henrys Vizcaíno que hoy es entrenador de los seleccionados de Pichincha, quien señala que estos resultados son muy alentadores para considerarla como una atleta con proyección nacional e internacional dentro del atletismo.
Rosmery llegó a Ecuador junto a sus padres, quienes se radicaron en Quito, cuando apenas tenía seis años de edad. El año anterior incursionó en la disciplina de Taekwondo, donde alcanzó muy buenos resultados para la provincia.
Pero la pasión por el atletismo la lleva en la sangre, especialmente motivada por la trayectoria y experiencia de su padre Henrys Vizcaíno, que en su etapa de juventud fue múltiple campeón nacional de Cuba en pruebas de velocidad, también medallista de los Juegos Centroamericanos y del Caribe, los Juegos del Alba, finalista mundial bajo techo en Rusia, además de participar en varias Copa Mundo de velocidad junto a grandes estrellas como Usain Bolt y otros campeones. Para Vizcaíno ha sido un honor estar en esa lista de grandes corredores mundiales.
Ahora con su hija, la ilusión es verla en el futuro también en un podio mundial, para lo cual debe trabajar intensamente, y además, espera que las autoridades deportivas y gubernamentales, le permitan regularizar su situación migratoria para que pueda competir por Pichincha y Ecuador en el futuro.